El licenciado Agustín Etchebarne, director general de la Fundación “Libertad y Progreso”, profesor universitario y economista especializado en Desarrollo Económico, Comercialización Estratégica y Mercados Internacionales, aseguró a La Mañana que es importante que desde el equipo económico nacional se apunte a recuperar una estabilidad macroeconómica, pero falta planificar una serie de reformas estructurales de fondo que necesita la Argentina para reducir el gasto público y bajar los impuestos que se cobran al sector privado productivo, al igual que trabajar en una real integración al mundo a través del Tratado de Libre Comercio pre-acordado con la Unión Europea.
“Me dio la sensación de que Martín Guzmán es un académico, un profesional. Me parece que es una persona sólida. Tiene un aspecto positivo: entiende que está tomando un problema de grandes dimensiones, y que la Argentina está muy complicada. El inconveniente es que en el equipo económico no están dando con la clave de cuál es el problema de la Argentina, porque sostienen las mismas ideas que se vienen manteniendo desde las últimas décadas. Son ideas de origen keynesiano”, explicó Etchebarne a este diario.
“Por más que esas ideas se apliquen de una manera profesional, y que incluso logren algún tipo de reactivación circunstancial, no creo que generen más que una reactivación de corto plazo. Después, van a existir problemas, porque se requieren reformas estructurales”, agregó.
“Por un lado, se espera que aumenten salarios, jubilaciones y Asignaciones Universales por Hijo. Por otra parte, van a ‘congelar’ precios a través de un acuerdo, probablemente por seis meses. Todavía se desconoce cuánto tiempo duraría ese convenio. También, van a poner algunos impuestos nuevos; y se va a iniciar una reestructuración de la deuda, un proceso que no va a ser fácil”, detalló.
“Seguramente, la negociación será más fácil con el FMI que con los acreedores privados. Habrá menos inconvenientes con aquellos que compraron bonos a precios bajos, después de la crisis iniciada en 2018. Pero se volverá más difícil en el caso de aquellos que adquirieron bonos entre 2016 y 2017, que significan unos 70 mil millones de dólares de gente que hoy está perdiendo mucho dinero”, evaluó el especialista.
“Guzmán imagina que como el país no va a pagar intereses de la deuda ni amortizaciones, esos dólares no se irán de la Argentina y servirán para iniciar algún tipo de reactivación. Eso puede funcionar en el corto plazo, pero el tema es recuperar la confianza. Y esto resulta muy complicado para la Argentina, porque no se habló ni una palabra de la falta de crecimiento del sector privado”, planteó.
“El sector privado no crece porque no tiene rentabilidad, debido a los altos impuestos. Lo pueden compensar con una devaluación. Pero no se habla de las reformas estructurales de fondo que necesita la Argentina, para tener un Estado nacional que sea más eficiente, gaste menos, cobre menos impuestos y le sirva a la ciudadanía”, especificó.
Por último, Agustín Etchebarne marcó la necesidad de que el Congreso nacional ratifique el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea. “Desde el nuevo Gobierno nacional se está dialogando con China y con Rusia, pero eso no es integración al mundo. Se debe ratificar el TLC con Europa. Seguramente, el Parlamento europeo lo va a ratificar. Brasil, Uruguay y Paraguay también lo van a hacer. Argentina deberá decidir si se integra al mundo o si se queda en un bloque con Venezuela y con algunas relaciones que mantiene con otros países. Si el país se queda solo, no será atractivo para los inversores, ni para los argentinos, porque se están yendo muchos empresarios al exterior. Estos temas estuvieron ausentes en las declaraciones realizadas por el nuevo ministro de Economía”, manifestó.