Este fin de semana, Max Verstappen, de Red Bull, fue el más rápido en Brasil y fue proclamado como ganador en el circuito de Interlagos, en la penúltima fecha del campeonato de Fórmula 1. Uno de los momentos destacados fue el accidente que protagonizaron los pilotos de Ferrari.

A seis vueltas para el final, Sebastian Vettel intentó sobrepasar a su compañero Charles Leclerc en una recta y arruinó ambos monoplazas. El alemán tocó con su rueda trasera izquierda la rueda derecha delantera del de Mónaco, provocando la destrucción de esa zona del monoplaza. Pero cuando parecía que sólo el vehículo su compañero había sido dañado, su neumático estalló producto de la fricción.

Leclerc, que marchaba cuarto, Vettel, que estaba quinto, se vieron obligados a abandonar. El choque fue catalogado como insólito debido a que ambos defienden a la misma escudería e incluso las cámaras de televisión captaron la reacción del equipo mecánico y técnico de Ferrari que siguió la maniobra desde los boxes.

Después de que ambos conductores se quejaron en la radio del equipo, y cada uno culpó al otro por el incidente, el jefe del equipo Binotto sugirió que ambos tenían “al menos un pequeño porcentaje de responsabilidad” por un incidente que incomodaba al equipo italiano. “Creo que los pilotos deben sentir lástima por el equipo”, dijo Binotto. “Eran libres para pelear, pero saben que los errores tontos son algo que debemos evitar para el propio equipo”.

“Debo decir que hoy ha sido un contacto muy pequeño, pero habrá tiempo para analizarlo y habrá tiempo para mirar el video, no quiero hacerlo en el calor”, agregó y reveló: “Con los conductores, ya tuve una conversación con ellos y no quiero juzgar ahora, no deberían juzgar ahora. Habrá un tiempo para hacerlo todos juntos”.

Por su parte, Vettel declaró: “No tenía mucho espacio a la derecha y obviamente tuve una mejor salida de la curva tres e intenté pasar”. “Eso es todo ... Y una pena para el equipo, obviamente”. Mientras que Leclerc explicó: "Todo sucedió muy rápido, y tan pronto como él entró, nos tocamos”. El conductor monegasco agregó: “Estoy bastante seguro de que somos lo suficientemente maduros como para dejar eso atrás”.

El dúo no fue castigado por los comisarios de carrera por el incidente. Después de hablar con ambos conductores y con un representante de Ferrari, los comisarios dictaminaron que ambos conductores podrían haber evitado la colisión. “Los comisarios determinaron que ambos conductores tuvieron la oportunidad de evitar o mitigar el incidente y, por lo tanto, que ninguno de los dos conductores tiene la culpa”, dijeron.

Éste no fue el único accidente de la carrera. En la anteúltima vuelta, Lewis Hamilton, que marchaba tercero, tocó el monoplaza de Alexander Albon, de Red Bull, en una curva y fue sancionado por la acción. El piloto de Mercedes, campeón de la Fórmula 1 esta temporada, fue sancionado por la maniobra y acabó séptimo.