Cristóbal López y Fabián De Sousa recibieron hoy una buena noticia. A una semana de haber salido del penal de Ezeiza, se enteraron que la Cámara Federal frenó la posibilidad de que puedan ser detenidos en una nueva causa que tiene en sus manos el juez Claudio Bonadio y en donde se los investiga por supuestas irregularidades en la construcción de un acueducto en el sur.

La Cámara Federal hizo lugar a un planteo de exención de prisión que habían formulado las defensas. Y dispuso que puedan permanecer en libertad, bajo palabra. “No advertimos fundamento razonable sobre la necesidad de su encierro preventivo”, remarcó el fallo.

Bonadio había rechazado el pedido de las defensas cuando aún no habían podido ser liberados por las otras dos causas por las que los procesó el propio magistrado. Eso hacía pensar que, cuando resolviera sus situaciones procesales, Bonadio podría evaluar no solo procesarlos sino también detenerlos. Pero la decisión de hoy de los camaristas Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens frena la posibilidad de una nueva detención, remarcaron a este medio fuentes judiciales.

La nueva causa contra López, De Sousa y otros surge de una denuncia que radicó la Oficina Anticorrupción en 2017 por obras que buscaban mejorar el abastecimiento de agua potable de un acueducto que toma agua desde el lago Muster, ubicado entre Chubut y Santa Cruz. Un informe de la SIGEN advertía de una serie de irregularidades, que dieron origen a sospechar que desde el Ente Nacional de Obras Hídricas de Seneamiento (ENOHSA) se habrían violado normas para beneficiar a una empresa específica.

La sospecha apuntaba a la firma CPC SA, una de las empresas de construcción del Grupo Indalo, que habría obtenido sobreprecios por casi $ 100 de pesos en el proceso. Hace dos semanas, el juez llamó a indagatorias a varios de los imputados, entre ellos Cristóbal López, su hijo Nazareno; Fabián De Sousa y su hermano Osvaldo. Aún no se definió la situación procesal de los indagados. Pero la defensa buscó saber si también pensaba dejarlos presos en la nueva causa y por eso planteó la eximición de prisión.

Aunque el fiscal Jorge Di Lello estuvo de acuerdo en otorgarla, Bonadio decidió rechazar ese pedido de exención bajo el argumento de que están presos en otras causas.

Sin embargo, la semana pasada, la misma Sala de la Cámara Federal (sin Llorens) les otorgó la libertad en esos expedientes ligados a cuadernos por los que estaban también detenidos. Antes tuvieron que pagar los 60 millones de pesos que les puso Bonadio de fianza a cada uno.

Ya en libertad, todavía estaba pendiente una respuesta sobre una posible orden de detención en esa tercera causa que pudiera devolverlos a prisión. La defensa de López aseguró que había sido arbitraria la decisión de Bonadio y detalló las circunstancias por las que consideraba que no existen riesgos procesales: “arraigo familiar y laboral, que tiene domicilio certificado, que carece de capacidad para disponer de su patrimonio -pues se encuentra inhibido y embargado- y que es una persona con notoriedad pública y se ha presentado cada vez que fue citado judicialmente, incluso para ser encarcelado”

Tras señalar que no hay razones para su encierro preventiva cuando todavía no se analizaron si se dictan procesamientos, los camaristas señalaron que “es necesario evaluar si, de mantener su libertad” López o De Sousa “intentarán eludir la acción de la justicia o entorpecer las investigaciones”.