El director de Anses-UDAI en Formosa, Diego Herrera, salió al cruce de la denuncia que realizó el ex concejal justicialista Dardo Caraballo, quien lo acusó ante la Justicia de utilizar su delegación para otorgar subsidios a desempleados con la intención de comprar votos. En el aire de La Mañana en Vivo, el funcionario minimizó la imputación y aclaró que sólo se trata de una maniobra direccionada por un “mercenario político”.
El abogado William Dardo Caraballo, en su carácter de ciudadano elector en el Distrito Formosa, afiliado al Partido Justicialista y abogado de la matrícula federal, denunció en la secretaria penal de turno del Juzgado Federal a los delegados de las agencias territoriales de los Ministerios de Trabajo y Producción, de Desarrollo Social y de la ANSES de la provincia de Formosa. En la presentación, sostuvo que estos funcionarios violaron el artículo 139 bis del Código Electoral Nacional con una “evidente compra de votos”, al otorgar un “subsidio a desempleados” que se instrumentaría a través del Ministerio de Trabajo y Producción de la Nación y otros organismos nacionales.
Esta mañana, Diego Herrera, uno de los acusados por el dirigente peronista, habló con La Mañana en Vivo y minimizó la maniobra: "Me enteré por el diario lo que hizo. Tengo una mezcla de sorpresa y risa, porque es una payasada lo que hizo este tipo, no tiene una base sólida ni fundamentos sus acusaciones. No me queda la menor duda que es un mercenario al que lo mandan a hacer la denuncia. No es la primera vez", sentenció.
Sobre la presentación que hizo Caraballo en la justicia federal, Herrera desestimó la acusación y aclaró que su delegación no inscribe ni otorga subsidios. “No estamos habilitados en nuestra delegación de hacer esos trámites administrativos. De igual manera, si prospera o se tramita la denuncia, será elevada al a sede central de Buenos Aires, porque acá no nos vamos hacer responsable de algo que no tenemos injerencia ni decisión”, amplió.
Por último, el funcionario lo caracterizó a Caraballo como un personaje poco serio que busca impacto con denuncias mediáticas sin fundamentos ni sustentos. “Creo que nadie lo toma en serio. De todas maneras, es una maniobra direccionada como la que ya hizo hace unas semanas atrás y la Justicia la desestimó”, concluyó.