En diálogo exclusivo con La Mañana, Nicolás Tereschuk, licenciado en Ciencias Políticas (UBA), Magíster en Sociología Económica (IDAES-UNSAM) y profesor de la Maestría en Políticas Públicas para el Desarrollo con Inclusión Social de FLACSO Argentina, consideró que de ganar las elecciones generales del próximo 27 de octubre, el Frente de Todos no estaría en condiciones de impulsar una reforma de la Constitución Nacional, y dijo que se requieren acuerdos amplios y profundos para poder encarar un proceso de esas características.
En este sentido, el profesional aseguró que algunos de los motivos por los cuales podría proponerse una reforma constitucional serían las “grandes asimetrías” que existen entre los recursos que maneja un jefe de Gobierno de Buenos Aires y aquellos que maneja un gobernante de Provincia por habitante, al igual que la posibilidad de resguardar o ampliar derechos de diferentes sectores sociales. Sin embargo, remarcó que esta clase de modificaciones no podrán materializarse si no existen consensos amplios entre distintos sectores.
“Luego de la reforma de 1994, no hubo intentos serios de modificar la Constitución. Durante el segundo mandato presidencial de Cristina Kirchner, circularon varias versiones periodísticas que hablaban de una propuesta para reformar la Carta Magna, pero no hubo ninguna iniciativa en ese sentido. Sin un gran acuerdo político, resultará imposible lograr eso”, explicó Tereschuk a este diario.
“Me cuesta pensar en una reforma si no se observan acuerdos entre diferentes sectores políticos. Luego de la reforma de 1994 y tras haber transcurrido diversas gestiones, de diferentes signos políticos y con diversos niveles de poder y de popularidad, queda claro que no es posible una modificación del texto constitucional sin grandes niveles de acuerdo político”, agregó.
“Puede ser que en algún momento exista la posibilidad de lograr grandes niveles de acuerdo si un sector reúne mucho poder y la oposición se ve obligada a pactar con el partido mayoritario, como sucedió en su momento entre el menemismo y el radicalismo. Pero pienso que los temores que hoy tienen algunas personas no tienen razón de ser”, aseveró el sociólogo.
“Por otra parte, aquella persona que en un futuro quiera reformar la Constitución tiene que entender que cambiar la letra de la Carta Magna no necesariamente se va a traducir en un cambio concreto en la práctica. Por cómo funcionan las cosas en la Argentina, el modo en el cual se manejan los actores políticos no siempre se relaciona con lo que dice la Constitución. Una modificación del texto constitucional puede ser positiva o negativa, pero no necesariamente tendrá impacto automático y directo en la realidad”, especificó.
En otro orden, Nicolás Tereschuk expresó que debería estudiarse la posibilidad de reformar la ley de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias, para incluir previsiones que eviten una crisis política y económica como la que se produjo luego de conocerse los resultados del último 11 de agosto. En este marco, propuso la alternativa de eliminar la obligatoriedad de presentarse en las PASO para aquellos partidos políticos que no tengan la necesidad de dirimir internas para definir candidaturas con miras a las elecciones generales.