Después de largos 36 años, el torneo nacional más emblemático del país, por la cantidad de años de vigencia que tiene, aterrizó en Formosa. Son otros tiempos, está claro eso, porque desde aquel 1983 a este 2019, el básquet argentino tuvo profundos cambios. En aquella época se estaba gestando la actual Liga Nacional que hoy tiene a Formosa con un embajador consolidado con La Unión. Incluso fue en ocasión de ese Argentino de 1983 que León Najnudel presentó su idea ante toda la dirigencia del básquet argentino. Después, la Liga dio a luz, hoy es una de las mejores del continente y el básquet argentino fue otro. Quizás la parte negativa de la historia la tuvo que pagar justamente el Campeonato Argentino de Mayores. Porque hoy ya no están en la cancha los jugadores top en esta competencia como pasaba 36 años atrás, pero en algún punto estaba claro que eso iba a ocurrir, que no había otra opción con la llegada de una competencia profesional.
De igual manera, imponen respeto esos 85 años de vigencia y la Confederación Argentina de Basquetbol todos los años tiene su lucha para que sigan en pie. Este año tuvo en Formosa un aliado estelar. Un aliado al que ya conoce por recientes experiencias, que se ganó un lugar desde el apoyo que recibe de su Gobierno provincial y también por mostrar capacidad para llevar adelante un emprendimiento de esta naturaleza. Lo dejó muy bien reflejado Sebastián Uranga, actual director deportivo de la Confederación Argentina de Básquet, que tomó la palabra en el acto inaugural en el Centenario y allí buscó con la mirada a Mario Romay, presidente de la Federación Formoseña de Básquet, para expresar a través del micrófono que era justamente Romay gran responsable de que el básquet de Formosa hoy tenga la consideración y el lugar que tiene en el básquet argentino.
Más adelante, fue Romay quien tomó la palabra devolviendo la gentileza y poniendo por delante que Formosa ha sido capaz de esto como consecuencia de un trabajo que ha tenido muchos protagonistas, una tarea de equipo, con una conducción muy clara del gobernador Gildo Insfrán.
El momento de los formalismos -ya antes habían hecho su presentación los doce seleccionados y también el cuerpo de árbitros del torneo- le dio lugar a la emoción cuando la Federación Formoseña de Básquet homenajeó a los dirigentes, jugadores y cuerpo técnico que representaron a Formosa en 1983 en aquel argentino. Así se evocó a los jugadores Francisco Medina, Edgardo Daniele, René Tomás, Manuel Barbieri, Oscar Jara, Hugo Montes, Alberto Montes, José Morales, Carlos Ferreyra, Chipy Olender, Héctor Brunelli y Jorge Duré. También el cuerpo técnico compuesto por Luis Barbieri, Oscar Scarafía y Juan Morales, el utilero Zunildo Mendoza y Carlos Donkin, presidente en ese entonces de la Federación Formoseña de Básquet.
De esa manera, esos 36 largos años de distancia tuvieron una suerte de ida hacia ese pasado y vuelta a este presente, siempre unidos por la misma pasión: el básquet. Y que sea este Argentino la fiesta del básquet fue el deseo común de todos en este acto inaugural que, una vez concluido, quedaron dispuestos a vivir siete grandes jornadas como en aquellos grandes tiempos. Formosa volvió a tener el Más Argentino de los Campeonatos y tiene por delante el desafío de que sea un éxito en todo aspecto, desde lo organizativo y también desde lo deportivo, con una camada de jugadores que quizás en unos 30 largos años sea a quienes hay que rendirles tributo.