El 22 de julio fue el Día Mundial del Cerebro y la Federación Mundial de la Neurología remarcó la importancia de concientizar a la sociedad sobre el cuidado de la salud cerebral. En diálogo con La Mañana, la licenciada en Nutrición y presidente de la Asociación Formoseña de Graduados en Nutrición, Rosana Polo, explicó que uno de los factores que influyen en la prevención y ayudan al tratamientos de enfermedades cerebrales es la alimentación.

Dietas variadas, ricas en vegetales y con grasas saludables, son necesarias para llevar una vida saludable y duradera, siempre y cuando se acompañen con descanso y ejercicio. Así lo expresó la especialista. Comentó que un estudio realizado en la Universidad de Chicago demuestra que una alimentación sana, puede favorecer a la prevención de enfermedades o accidentes cerebro vasculares, como por ejemplo el alzhéimer.

Habló de mantener una dieta mixta para mejorar la memoria y comentó que está comprobado, una vida saludable con dietas de este tipo, podría lograr un rejuvenecimiento cognitivo de 11 años. Basta con comer sano, descansar y ¡moverse!

Según explicó, dicha investigación, combinó la mediterránea con otra creada para controlar la presión arterial y creó una especial para intervenir en el retraso neurodegenerativo. “Estas dietas -detalló- tienen en común: el consumo de vegetales de hojas verdes y de pescado de mar de aguas profundas denominados “azules” como el atún, el salmón, la sardina”.

“Muchas personas creen que llevar una vida saludable es costosa. Sin embargo, se gasta mucho más en productos procesados e industriales”, contrastó para alentar a una alimentación natural, regional y beneficiosa para la salud en general.

“Las hojas verdes, se consiguen con los productores locales”, expresó. Hay otros alimentos que también son altamente recomendados ya que se incluyen en estas dietas con base científica: los frutos secos y el aceite de oliva. “Si bien en Formosa no tenemos los frutos que sí hay en el sur, pueden aprovecharse las variedades más económicas como el maní”, aclaró.

GRASAS SALUDABLES

Polo explicó que al menos el 50% del cerebro está compuesto de grasas buenas. Por eso hay que consumir buenos aceites, como el aceite de oliva. Por otro lado, indicó que “los pescados de aguas profundas producen un aceite que no producimos, que debemos consumir, como el Omega 3. Este componente también lo conseguimos en las semillas de chia y lino”.