El 9 de julio se estrena la nueva temporada de El Marginal, una serie argentina de Underground con gran éxito. Se estrenó por primera vez en la Televisión Pública Argentina, en junio de 2016, escaló a Netflix y ahora va por su tercera etapa. Y como siempre pasa, también ahí, hay un formoseño. Se trata de Carlos Cano, un actor con un gran recorrido actoral. Aprovechamos el nuevo lanzamiento para hablar con él, de él, de la actuación y el teatro.
Carlos Cano es formoseño, es actor y vive en Buenos Aires, aunque cada tanto vuelve a visitar a su familia que vive en Boca Pilagá. “Me hace bien venir, respirar un poco y volver; son mis vacaciones”, dice.
Carlos, más conocido como “Litokr”, estudió en el Instituto San Martín y en el ‘98 fue a estudiar Derecho a Corrientes, una decisión que tomó sin pensar mucho, pero que le abrió las puertas hacia su lugar: “La psicopedagoga del colegio me dijo que cualquier ciencia social me iba a ir bien. Como no estaba seguro, me anoté. Pero no era por ahí. Una vecina del edificio me invitó a unas clases de teatro que su tío daba en el teatro Vera, me mandé, me gustó, me alentaron y me animé a más. Me anoté entonces al IUNA (Instituto Nacional de Arte Dramático que ahora es Universidad), y quedé. Ahí empezó todo. Desde el 2010 trabajo de actor”, resumió.
Antes de “EL Marginal”
De los castings de publicidad a las salas de teatro, y luego, al cine. Así fue -es- su vida antes de El Marginal. “Estuve en una publicidad de Gancia y de Nuevo Peugeot. También fui a Sudáfrica a protagonizar una del Mundial 2010, para Paraguay. Ser del Norte me dio muchos trabajos al principio, como éste. Esa fue una experiencia increíble. De ahí hice un cortometraje para la ENERC de Buenos Aires, también hacía de paraguayo. La que hacía mi pareja era Gabriela Pastor, otra formoseña con quien actué, la primera vez que lo hice en mi vida, en catecismo. Ahí nos volvimos a encontrar”, describió. Los castings de televisión son más cerrados, pero las puertas se van abriendo. “Lo primero que hice fue Criminal, un unitario de Canal Nueve”, comentó. También estuvo en “Zama”, el gran largometraje de Lucrecia Martel producida por Almodóvar que incluyó imágenes del Bañado La Estrella y se ganó importantes premios.
Pero el teatro es el teatro
Actualmente, Carlos Cano actúa en 38 S M (Shakespeare Material), una obra del Teatro Nacional Cervantes que recorre las 38 obras firmadas por Shakespeare. Ahora se redujo a 5 S M para una gira federal. La está dando junto a un elenco fantástico.
“El teatro es para todos. Hay que hacerlo. Dedicarse a la actuación es un poco más complicado, pero no imposible. Si uno le pone garra, ganas y corazón, las oportunidades aparecen. Porque todos tenemos algo distinto, los rasgos, las características particulares. No hay que achicarse; al principio puede ser duro, pero no imposible”, reflexionó.
“El contexto político y social es complicado para los que actuamos, pero a su vez, esta crisis hace que saquemos nuestra creatividad y hagamos teatro en lugares y en espacios no convencionales, por ejemplo: se está haciendo Hamlet en el living de una casa. Por suerte, el teatro independiente siempre encuentra su manera de expresarse, sobre todo nos da la capacidad de convertir una obra clásica en una protesta moderna para decir verdades de nuestra actualidad”.
Decisión
“Tengo la suerte de estar en estos momentos en un teatro oficial, pero mañana no sé. Tengo proyectos propios, independientes. Es más difícil ahora, tenemos que estar cuidando que no nos retiren los subsidios y al mismo tiempo buscar distintos apoyos para llevarlos a cabo”, explicó para rematar que, aún así, “el teatro independiente es una decisión fuerte que nos convierte en verdaderos artistas.