Tras unas merecidas vacaciones, la escuela de fútbol "Estrella Ribereña" retoma sus actividades para dar inicio a una nueva temporada de formación y diferentes competencias a lo largo de este nuevo año.
Los objetivos propuestos por el profesor Raúl Gamarra, que se encuentra a cargo del funcionamiento de la escuela, son el gusto por la actividad y la competencia física de esfuerzos, alegría y respeto, además de desarrollar la capacidad muscular en función a su edad. También, iniciarse en la actividad del fútbol, como plataforma de vivir, sentir y pasar buenos momentos, junto a todos los chicos y profesores de la institución.
Los entrenamientos serán los días martes y jueves, en la cancha del Colegio de la Rivera. Se dividirán en dos grupos, de acuerdo a la edad. En el primero estarán los niños de 6 años hasta los 9, en el horario de 17 a 19; y en el segundo se encontrarán los más grandes, de 10 a 12 años, de 18 a 20 horas.
Se les informa a los padres de todos los chicos que quieran sumarse, además de los que ya asisten a la misma, que la escuela pretende dar a los jugadores un conjunto de destrezas técnicas y habilidades motoras, para resolver las diferentes situaciones que propone el juego del fútbol. Por otro lado, facilitar el desarrollo de la afirmación de la personalidad, poder crear las posibilidades propias y ajenas, brindando las herramientas para el mejoramiento de la autoestima y el cuidado de la salud con todos sus valores. También, a través del juego, permitir una adecuada inserción social con los nuevos compañeros que se sumen a esta experiencia, como así tambien con los niños que ya son parte de la escuela.
Para finalizar, en esta institución, se va a lograr que el niño ocupe positivamente su tiempo libre. Y en ese marco, para que sea un buen hijo, buen estudiante, buen amigo y buena persona, con los valores que van a adquirir fuera y dentro del campo de juego. Luego de pasar por estas etapas, se verá si sus aptitudes les permiten -y la fortuna sume en esa dirección- ser campeones.
Los sábados se realizarán competencias con los chicos de otras escuelas; así los chicos podrán divertirse y poner en práctica todas las habilidades trabajadas en la semana, además de integrarse con los niños de otras escuelas y compartir en una jornada de competencias, que es algo positivo en esta etapa de formación.