Las graves consecuencias que dejó en el territorio provincial la última crecida del Pilcomayo llevó a que la Defensoría del Pueblo dispusiera acciones conjuntas con la Unidad Provincial Coordinadora del Agua para insistir "ante Nación sobre la necesidad de llevar a cabo una planificación de acciones técnicas de carácter hídrico y de la que participen las provincias afectadas -Formosa, Salta y Jujuy- ante el ultimo escenario que dejó la crecida del río Pilcomayo", arrancó diciendo el Dr. José Gialluca.
A través de un comunicado, el defensor detalló que "se propuso la reactivación de varios paleocauces que se encontraban inactivos hace años y se denunciaron los graves daños ambientales, productivos y sociales en la zona de crecida. En esta línea de trabajo, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto notificó, mediante el subsecretario de Asuntos de América, Leopoldo F. Sahores, que la Secretaría de Recursos Hídricos, así como nuestra Embajada ante la República del Paraguay, ha tomado cartas en el asunto".
Desde el Organismo de la Constitución se señaló que el Consejo Hídrico Federal (COHIFE), creado por el Dec. 1.142/2.003, integrado por las autoridades hídricas de las provincias y la Secretaría de Recursos Hídricos de Nación, "debería cumplir con sus objetivos, que no son otros que los de concertar los lineamientos que integran los aspectos socioeconómicos y ambientales de la gestión de los recursos hídricos, con el objeto de lograr un aprovechamiento racional, equitativo y sustentable del agua en un Marco Federal".
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