Desde el barrio San Antonio (ex 7 de noviembre), a sólo unos 100 metros del predio del velódromo donde ayer se encontró el cuerpo sin vida de la estudiante de 16 años, el móvil de La Mañana en Vivo recogió testimonios de dos frentistas preocupadas por la incesante inseguridad que se vive en la zona.

La falta de iluminación, los arrebatos y la concentración de jóvenes con adicciones generan intranquilidad durante todo el día en el recorrido que empieza en el Parque de los Niños y finaliza en la Universidad.

“Hace tiempo que este lugar se convirtió en una zona insegura por la oscuridad que hay durante la noche, la circulación permanente de jóvenes con adicciones y los arrebatos reiterados a estudiantes que se trasladan a la facultad. Hace más de 10 años que este lugar se transformó en un sector inseguro de la ciudad.

Se profundizó el problema con el gran abandono que hay en dos calles críticas, la que pasa por frente de la escuela adventista y la paralela de ésta, que está tras la cancha auxiliar del estadio de la Liga. Son de terror y a la noche nadie se anima a transitar por ahí porque no se sabe con qué te podes encontrar”, aseguró una vecina.

Según las declaraciones, el recorrido que va desde el Paraíso de los Niños hasta el predio de la Universidad Nacional de Formosa, por la ex avenida Los Pindó, desde hace un tiempo atrás que se convirtió en un escenario de la capital con innumerables problemas de inseguridad, pese a que hay una constante circulación de personas a pie y en vehículos. “La presencia policial se ve, hay patrullaje durante el día, pero no alcanza. El parque y la escuela especial que está a medio terminar, cerca del club Vialidad, más las calles oscuras que cortan la avenida, son los puntos más críticos de este lugar”, agregó.