Tras el desorden ocurrido el domingo último en el barrio La Floresta, la Policía identificó a los integrantes del grupo agresor y realizó dos allanamientos que finalizaron con el secuestro de varias armas blancas y marihuana, como así también logró la aprehensión de uno de los implicados.

La investigación policial realizada en torno a este hecho llevó a obtener elementos de prueba suficientes en torno a la identidad de las demás personas que participaron de la agresión y el sitio donde residirían.

Toda la información recolectada fue puesta a consideración del juez de turno, quien valoró las pruebas y dispuso el allanamiento de dos inmuebles del barrio La Floresta.

En la tarde del lunes último, personal de la comisaría jurisdiccional, con la colaboración de efectivos de distintas dependencias que integran la Unidad Regional Uno, Dirección de Policía Científica y del Destacamento Desplazamiento Rápido (DDR), realizó ambas requisas domiciliarias en forma simultánea.

Como resultado, los efectivos secuestraron un tubo de gas y varias armas blancas que resultan de interés a la causa. Además, encontraron en el interior de uno de los dos inmuebles un envoltorio con marihuana.

Personal de la Dirección General de Drogas Peligrosas requeridos en el lugar, con la utilización de reactivos químicos, establecieron que se trataba de marihuana, procediéndose al secuestro del estupefaciente y a la detención de un hombre, realizándose otra causa en forma paralela por infracción a la Ley 23.737 con intervención del Juzgado de Instrucción y Correccional contra el Narcocrimen.

Antecedentes

El conflicto entre vecinos en el barrio La Floresta ocurrió el pasado domingo y terminó con un principio de incendio en una vivienda, la sustracción de algunos bienes, desorden y agresión con armas blancas. En ese momento, la Policía aprehendió a cuatro personas –tres hombres y una mujer- y retuvo a un menor de 17 años, restableciendo el orden.

El hecho se registró cerca de las 14.30 horas, tras lo cual un vecino de dicho barrio se comunicó a la línea de emergencias 911 solicitando presencia policial en la calle Pauzier y Chazarreta por un incendio de vivienda provocado por sus vecinos.

Rápidamente, el operador de turno dispuso que una dotación del Destacamento de Bomberos del barrio San Miguel acudiera al lugar, como así también efectivos de la zona II del Comando Radioeléctrico Policial.

Una vez en el sitio, los bomberos realizaron las tareas de extinción de un colchón y una motocicleta que el damnificado se encontraba tratando de apagar con baldes de agua, realizando la extinción total al cabo de unos minutos, determinándose que el siniestro fue de carácter intencional.

Los efectivos de la Zona II del CRP se entrevistaron con el dueño de casa, refiriendo que su vecino primero le arrojó escombros, para luego ingresar violentamente a su vivienda junto a otras tres personas más -dos de ellas mujeres-, agrediéndolo físicamente con un machete e incendiando un colchón y una motocicleta de 110 cilindras que estaba en el interior del inmueble. No conforme con ello, le robaron un tubo de gas de 10 kilos y un bafle para luego darse a la fuga. En el lugar se solicitó una ambulancia del SIPEC, cuyos profesionales trasladaron al dueño de casa hasta el Hospital Central para recibir asistencia médica.

Cuando los policías llegaron al lugar del hecho, en calle Pauzier al 2.200, vieron a dos grupos de 12 personas aproximadamente entre hombres y mujeres, quienes portaban armas blancas (machetes, palos y escombros) en su poder y se encontraban agrediendo a un sujeto provocándole lesiones.

Ante la situación, se vieron obligados a efectuar disparos disuasivos al aire con la escopeta con postas de goma, logrando que los inadaptados se retiraran del sector, permitiendo que los uniformados retiren a la persona lesionada, la que fue llevada por una ambulancia del SIPEC al Hospital Central; en tanto los demás ingresaron a una vivienda del lugar, abandonando un bafle en la calle, el que fue secuestrado en presencia de testigos por resultar de interés a la investigación, al igual que algunos escombros utilizados para la agresión.

Al lugar acudieron varios móviles en apoyo, como así también el grupo antidisturbios del Destacamento de Desplazamiento Rápido (DDR), quienes restablecieron el orden y paz social rápidamente. También acudió el perito y fotógrafo de la Dirección de Policía Científica, documentándose los efectos secuestrados que serán incorporados a la causa.

De las averiguaciones realizadas, se estableció la identidad de los agresores, lográndose la aprehensión de un joven de 19 años, que participó de la agresión, quien está involucrado en varios delitos contra la propiedad y las personas. Momentos después se detuvo a dos hombres más, a una mujer, y se retuvo a un menor de 17 años que también tuvo participación en el hecho.